Si te gustan las maravillas naturales, recorre nuestra cueva, no te arrepentiras
Puedes conocer la Cueva Cerdaña por tu cuenta o aprovechando excursiones organizadas, nosotros ponemos en contacto a todos los clientes que nos lo soliciten con los organizadores
Hace unos días descubrí esta bonita leyenda de la cueva que creo os gustará
LEYENDA DE LA CUEVA CERDAÑA
Dice la leyenda que hace muchos, muchos años, un soldado natural de Pina de Montalgrao se enamoró en la isla de Cerdeña de una hermosa chica la cual llevó a su pueblo, la familia del joven soldado que tenía reservados otros planes para él, no vio con buenos ojos aquella relación y no aceptó a la hermosa muchacha de la que se decía que era una bruja. El desolado joven se fugó con su amada refugiándose en una cueva cercana al pueblo, a él le gustaba salir a cazar mientras ella permanecía en la cueva, un día la muchacha se puso a explorar las cavidades más profundas de la cueva, cuando su amado regresó no la encontró por más que buscó en los lugares recónditos y escondidos de la gruta, se dice que la joven se perdió para siempre y que su cuerpo inerte todavía reposa en su interior. Desde entonces a esa cavidad se la denomina la Cueva de Cerdaña.
Presenta 2 bocas separadas entre sí unos 7 metros, la mayor de 6 x 2 metros da acceso a través de un descenso de 6 metros a una sala descendente de 60 x 35 x 15 metros en la que abundan los bloques y formaciones estalagmíticas. En su extremo NW a través de una fractura se accede entre bloques a una serie de pequeñas estáncias y simas, alcanzando una profundidad máxima de 85 metros. En el extremo N de la sala, y tras descender un estrecho pozo de 3 metros aparece una sala irregular muy caótica de unos 50 x 15 x 5 metros.
Cavidad visitada por Cavanilles en el siglo XVIII. También fue visitada a finales del siglo XIX por el histólogo Ramón y Cajal, y a principios del siglo XX por Sarthou Carreres y por los biólogos Jeannel y Racovitza (1918-27).
Según otras leyendas, desde su interior se oyen cantar los gallos de Pina.
Cueva-santuario en época ibérica. En ella se realizaban libaciones purificadoras y se ofrecían frutos de la tierra y exvotos a las divinidades telúricas.
Durante la pasada Guerra Civil Española (1936-39) fue utilizada como observatorio militar.
Las primeras exploraciones arqueológicas en la cavidad se deben a Inocencio Sarrión Montañana quien en compañía de José Soler Carnicer la exploró en 1966, fruto de esta visita y de otras posteriores son una serie de artículos en los que Sarrión estudia los numerosos restos de fauna y materiales arqueológicos obtenidos (Véase la bibliografía).
Situada en la ladera de un valle epigeo, se ha formado principalmente como resultado de la acción de las aguas del torrente, atacando la diaclasa que forma la cavidad. Más tarde, un proceso clástico ha desprendido grandes bloques del techo tapando parte de la zona inferior. Es notable la afluencia de columnas estalagtíticas situadas en la sala superior, que en algunos casos llegan a tener una altitud de unos 15 metros.
Debido a la amplitud de la cavidad, su iluminación y sus condiciones físicas, esta cueva ha sido utilizada como lugar de habitat prolongado y estable desde la Edad del Bronce hasta la época ibérica, momento en que adquiriría la condición de cueva-santuario tal y como reflejan los numerosos vasitos caliciformes ibéricos recuperados de su interior.
Ver también el vídeo de youtube, publicado el 12/08/2014 por VIASUBTERRANEA CUEVA CERDAÑA. Aspecto general de la sala superior.